El alcalde Carlos Martínez y el responsable de la empresa Rebi, Alberto Gómez, han visitado esta mañana la planta de biomasa de la empresa así como los trabajos de ejecución de la red suministro de calor a través de conductos subterráneos que, inicialmente, permitirán desde el mes de septiembre poder ofertar energía limpia en el área más próxima a la central. Carlos Martínez ha insistido en tres aspectos fundamentales de este proyecto que además de los objetivos inmediatos para mejorar la calidad de vida de la ciudad, encara simultáneamente la elaboración de un proyecto para optar a un programa europeo (Fondos Faro) de la mano de la propia Soria y de forma conjunta con Roma y Viena.
“En primer lugar quiero destacar que se trata de un proyecto empresarial interesante. Hablamos de capital soriano que apuesta por la innovación, desarrollo y renovables con un proyecto que supone una inversión del entorno de los 6 millones de euros y que genera cerca de 45 empleos, directos e indirectos”, ha explicado Carlos Martínez. El alcalde ha añadido otro aspecto fundamental a la hora de poner en valor esta iniciativa al indicar que “permitirá que los vecinos y vecinas puedan ahorrar en energía y abaratar el coste energético en las viviendas en el abastecimiento de calor”. Por último, no ha querido pasar por alto que estas ventajas llegan de la mano de “una energía limpia y renovable que, además, se suministra de madera, un recurso endógeno de nuestra propia provincia. Se aprovecha nuestra materia prima y la convertimos en energía, sustituimos el petróleo o el gas de otros países con recursos propios caminando hacia el autoabastecimiento”. Actualmente, según informa la propia empresa, se acometen las últimas obras en la planta, ya se dispone de astilla almacenada para el arranque con más de 500 toneladas y se están ejecutando las canalizaciones que en esta primera fase tendrán una longitud de 7 kilómetros (14 en doble dirección).
“El propio Ayuntamiento comparte estos objetivos en nuestro camino de ser una ciudad sostenible, Reserva de la Biosfera y ligada a la palabra medioambiente y, por ello, lo impulsaremos en la medida que podamos en un momento en que inversiones de este tipo, además, no sobran”, ha concluido el alcalde.
Alberto Gómez, representante de la empresa Rebi, por su parte, ha detallado el funcionamiento de la planta y ha marcado septiembre como posible fecha de inicio de la actividad. La previsión es que las calderas arranquen a finales de septiembre y tras la puesta en marcha de la central se irá dando servicio a los primeros tramos y poco a poco se irá extendiendo con el objetivo de poder completar toda la primera fase de la ciudad antes de acabar el año. Los primeros datos cifran en un 80% el grado de aceptación en aquellas viviendas por las que pasa la red, según ha explicado el responsable de la firma. Gómez ha apuntado también que “la idea es poder llegar al 70% de la ciudad con la suma de esta fase y de la segunda, cuyo proyecto podríamos presentarlo este invierno una vez localizada la ubicación más interesante y que podríamos ejecutar en un año”.
Por otro lado, ha adelantado que se está trabajando en la elaboración de un proyecto europeo en colaboración con el Ayuntamiento de Soria, pero también con el CIEMAT así como Roma y Viena para optar a un programa de fondos ‘Faro’. “Estamos ilusionados con este proyecto que unirá el recurso local de la biomasa con otro recurso muy propio de Soria, que es el sol. El objetivo es hibridar la central de biomasa con colectores solares y esta será la gran novedad del proyecto que presentaremos a Europa”, explica. Alberto Gómez ha recordado que las horas de sol de Soria, al margen de la temperatura, están al nivel de Almería. “Hay que distinguir sol y calor, pero la insolación en nuestra ciudad es similar a la de Almería. Tenemos radiación que es lo que genera esta energía”, ha matizado.
“Aprovecharemos la energía que sobra del sol y lo cumplimentaremos con la biomasa, uniendo dos energías limpias y este sistema puede colocar a Soria como la ciudad civilizada con menores emisiones del mundo. Es un objetivo que se puede conseguir”, ha resumido. A través del CIEMAT se ha contactado con otras ciudades internacionales y se avanza en este programa de calor sostenible. La importancia de esta iniciativa, al margen de la medioambiental y de referencia, es que además ofrece importantes apoyos económicos con subvenciones europeas a fondo perdido ya que “sólo se eligen seis en toda Europa ya que la meta es que sea un modelo para el resto de las ciudades”. La presentación del mismo será en el mes de mayo.
